La asertividad
La asertividad es una habilidad de comunicación que implica expresar pensamientos, sentimientos y necesidades de manera clara, directa y respetuosa. Ser asertivo significa defender los propios derechos y puntos de vista sin agredir ni ser pasivo, logrando un equilibrio entre la autoconfianza y el respeto hacia los demás.
¿Por qué es importante trabajar la asertividad?
Ser asertivos nos permite vivir de manera más coherente con quienes somos. Nos ayuda a poner límites sanos, a proteger nuestro bienestar emocional y a relacionarnos desde el respeto mutuo.
Cuando no somos asertivos, solemos reprimir lo que sentimos o pensamos, y eso puede generar frustración, ansiedad, resentimiento o sensación de invisibilidad. Otras veces reaccionamos de forma impulsiva o agresiva, y luego nos sentimos culpables o incomprendidos. La asertividad es el punto medio que nos permite expresarnos sin dañar, y protegernos sin herir.
Motivos que suelen llevarnos a no ser asertivos
Detrás de la falta de asertividad hay muchos motivos como el miedo al rechazo o la culpa. A continuación veremos los motivos que suelen llevarnos a no ser asertivos:
Muchas personas han aprendido desde pequeñas que callar, agradar o ceder es “lo correcto”. Si expresar una necesidad fue castigado, ignorado o ridiculizado en el pasado, es lógico que ahora cueste hacerlo.
En algunas familias o culturas, se valora más la obediencia que la individualidad, o se interpreta el desacuerdo como falta de respeto. Esto deja poco espacio para la expresión personal.
Si sentimos que nuestras ideas o necesidades “no valen tanto” como las de los demás, nos costará hacerlas visibles.
Temor a ser criticado, juzgado o ridiculizado por expresar pensamientos y sentimientos.
Temor a que los demás no acepten mis ideas o sentimientos, lo que podría llevar a una pérdida de relaciones o a ser menospreciado.
Temor a que los demás dejen de apreciarnos o respetarnos si expresamos opiniones contrarias o necesidades personales.
Temor a que si se expresan necesidades o deseos se generen conflictos o discusiones desagradables.
Sentimiento de culpa por decir “no” o por poner límites, creyendo que uno está siendo egoísta o insensible.
El semáforo de la asertividad
Antes de responder en una conversación difícil:
🔴 PARA: Respira y no respondas en automático.
🟡 PIENSA: ¿Qué siento? ¿Qué necesito?
🟢 ACTÚA: Elige una respuesta que te respete a ti y al otro.
Prepara una lista de frases asertivas
Anota y practica frases como:
“En este momento no puedo, pero gracias por pensar en mí.”
“Me siento incómoda cuando sucede esto, ¿podemos hablarlo?”
“Necesito un momento para pensarlo.”
Puedes poner estas frases en un PDF descargable o una ficha imprimible.
Recuerda que, si lo necesitas, puedes concertar una sesión conmigo para profundizar en este tema de forma totalmente personalizada a tus necesidades.
Test de asertividad
Ejercicios de asertividad
Diálogo interior asertivo
Piensa en una situación en la que no fuiste asertiva. Escribe qué dijiste, cómo te sentiste, y qué te habría gustado decir. Luego, redacta una nueva versión del diálogo siendo asertiva:
¿Qué emoción querías expresar?
¿Qué necesidad había detrás?
¿Cómo lo podrías haber dicho de forma clara y respetuosa?
Completa las frases
El movimiento se demuestra andando y la asertividad también. Te propongo que hagas estos ejercicios para trabajar tu asertividad.
